Un caso claro en el que las expectativas han actuado en contra de mi experiencia lectora: “Obra maestra” o “El mejor thriller literario del año según The Guardian”… En mi opinión, tampoco hay para tanto. En el mejor de los casos, podría estar en la onda de Bonnie Jo Campbell, Larry Brown, Offutt o Butler, por su rollo de thriller rural americano con toques de drama familiar; en el peor, lo mismo pero despidiendo un tufillo comercial en plan Dicker. Una novela adictiva de esas que rápido te la imaginas convertida en peli o teleserie.
Walk, un policía de pueblo bonachón un poco limitado (más a partir de que es diagnosticado de Parkinson) y Duchess, niña coraje, asilvestrada y lenguaraz, una forajida -muy muy Margo Crane-, son los protagonistas principales, aunque el elenco incluye una buena porción de secundarios, tal vez demasiados. El argumento gira en torno a dos ejes : el esclarecimiento de un crimen que tiene su origen en otro suceso trágico ocurrido treinta años atrás, y la odisea de Duchess por cuidar de su hermanito y encontrar su lugar en el mundo.
No me han sorprendido demasiado los giros del guión ni me ha llamado la atención su estilo, correcto pero poco personal, sin embargo sí ha conseguido sumergirme en su ambiente tenso y contenido de praderas, montañas y caballos, de pueblos pequeños y cerrados poblados por algunos tipos degenerados que campan a sus anchas mientras que otros, aun patibularios y pendencieros, ocultan una obstinada nobleza. Y cómo no dejarse seducir por su irreductible protagonista, Duchess Ray Radley, cómo no solidarizarse con su orgulloso desamparo…
135″-Yo soy una forajida, para que lo sepas: los problemas me persiguen»
84 «Joder, Walk, eres como un niño: todo se reduce a mejor y peor, a lo bueno y lo malo. Ninguno de nosotros es bueno o malo: no pasamos de ser conjunto de las cosas, mejores y peores, que hemos hecho»
130 «ella no le había soltado la mano a su hermanito mientras el sacerdote intentaba que se olvidarán de sus vidas rotas hablando de la necesidad que Dios tenía de otro ángel en el cielo, como si nada supiera de la atormentada vida que había abandonado este mundo»
186 «-Mi padre dice que mi madre le respondió lo mismo la primera vez, pero que al mismo tiempo le decía que sí con los ojos, por lo que no se dió por vencido e insistió.
-Así hablan los violadores»
223 «El triángulo es la forma más sólida de todas, lo había aprendido en clase de matemáticas»
230 «Igual sospechaba que su madre estaba liada con el cartero o creía que su mano atrofiada estaba cobrando fuerza y pronto podría estrujar latas de cerveza»
318 «- A ti te gusta que las cosas no cambien, lo noto en tu casa, en tu despacho… te aferras al pasado con todas tus fuerzas»
337 «-Hace veinte años que me dedico este trabajo. He estado en todas partes, las he visto de todos los colores y he conocido a personas de todo tipo. Pasan por mí existencia, entran y salen. He conseguido hogares para centenares de niños y siempre, siempre, he acabado llorando. Este trabajo es mi vida, como tiene que ser, pero…»
Salamandra. Un 7.8.
Thriller/Drama rural.
Sant Cugat, 27 de mayo, 2022
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