Segunda incursión (casi a renglón seguido, espoleado por la gratificante lectura de «Casa de verano con piscina») en la obra de este autor neerlandés agudo y provocador, un poco brutote también.
De nuevo el libro tiene como protagonista a un tipo despreciable y de un cinismo indignante, Paul, una especie de ex-profesor que ha sufrido algún episodio de inestabilidad psicológica y que comparte con el lector su fobias y frustraciones. Una noche es convocado junto a su mujer Claire por su hermano Serge, político emergente y prometedor (aunque tiene tela… los dos tienen tela), y su cuñada Babette a una cena en un restaurante pijo. Los cuatro deben tratar un tema urgente y grave que afecta a sus respectivos hijos. “La cena” toma su motivo principal de un crimen de la crónica negra de sucesos española que no voy a desvelar pero que todos recordamos y plantea el dilema de hasta dónde debe llegar un/a padre/madre para proteger a su hijx.
He leído alguna crítica en contra de su calidad literaria; a mí me ha parecido muy correcta, sencilla, efectiva, no muy personal, puestos a quejarse de algo. El argumento es sin duda ameno y punzante, un poco molestoso… en fin, una buena experiencia de lectura. Entretenimiento, crítica, morbo y reflexión a partes iguales.
55 «Me parece un signo de debilidad que la conversación se decante demasiado pronto hacia las películas. Me refiero a que las películas son más bien algo para acabar la velada, cuando verdaderamente ya no queda mucho que decir»
79 «Una sonrisa triunfal, no pude por menos de pensar, la típica sonrisa de un hombre con un chorro potente, la de alguien que se alegra de que haya hombres a quienes orinar les cueste más que a él. Pues ¿acaso un chorro potente no es también un signo de virilidad?”
86 «Me pregunté cómo sería tener un padre al que no le pudieses ver la cara por culpa de su barba descomunal»
130 «…pertenecía al pasado: a un pasado lejano en el que aún éramos felices, pensé de súbito, y me mordí el labio «
140 «En Holanda existe una red de protección social. Nadie tiene necesidad de dormir en el habitáculo de un cajero»
166 «Esos otros planes existieron de veras, pero no le importan a nadie»
203 «mi experiencia me dice que cuando la gente repite tantas veces tu nombre es que quiere algo de ti, y suele ser algo que tú mismo no quieres»
Salamandra. 8.4
Thriller familiar
La Floresta, domingo 2 de octubre, 2022
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