Soy más de novedades que de clásicos, aunque no siempre ha sido así: de joven me atrevía con ladrillos que hoy no osaría atacar ("La montaña mágica" es uno de ellos: ya me pareció un poco coñazo en su momento, ahora creo que me resultaría insufrible). Sin embargo, suelen atraerme obras que reelaboran o ficcionan... Leer más →